Estas amigas están tomando medicamentos para bajar de peso, pero sus experiencias han sido completamente diferentes
Una amiga comenzó el viaje con el GLP-1, la otra se asegurará de que ambas lo terminen.
Cuando AnnaLee Canario y Dacia Benjamín se conocieron hace una década, enseguida congeniaron y se convirtieron en mejores amigas. Era un momento difícil para Dacia, que ahora tiene 40 años, ya que había regresado a su ciudad natal, debía cuidar a sus dos hijos pequeños y no tenía amigas con quienes hablar. Un día de invierno, publicó en Facebook que iba a un centro comercial local con un parque infantil cubierto para que sus hijos liberarán algo de energía y preguntó si alguien quería sumarse. Dacia no esperaba que nadie se presentara.
Pero entonces, la hija de AnnaLee entró a toda velocidad y sin frenos por la puerta del centro comercial, hasta que tropezó y se cayó de bruces. “Sabía que seríamos amigas”, le contó Dacia a Yahoo Vida y Estilo. “Fue caótico, pero disfruté cada minuto”. Pero lo más importante es que las dos mujeres entablaron inmediatamente conversación. “Con la maternidad, encajas o no”, dijo AnnaLee. “Ese día fue fácil hablar. Todo pareció natural”.
Esa compenetración hizo que los desafíos que normalmente requieren mucho esfuerzo parecieran un poco más factibles. Un ejemplo: la pérdida de peso. A ambas les interesaba probar los medicamentos GLP-1 pues habían visto en TikTok que otras personas habían tenido éxito con ellos. AnnaLee comenzó primero su tratamiento y Dacia la siguió unos meses después. Pero a partir de ese punto, sus caminos con el GLP-1 divergieron enormemente.
Los grandes cambios vitales, incluyendo la pérdida de peso, pueden ser más llevaderos si se cuenta con apoyo social, pero también ponen a prueba nuestras relaciones más cercanas, le dijeron los expertos a Yahoo Vida y Estilo. Sin embargo, historias como la de AnnaLee y Dacia demuestran por qué tener a una amiga que te apoye puede ser clave para tener éxito cuando te embarcas en la aventura de perder peso.
Por qué es mejor hacerlo juntos, según los expertos
Las investigaciones son claras: es más fácil perder peso juntos que solos. De hecho, eso vale para muchos cambios en el estilo de vida, como mejorar los hábitos alimenticios, empezar a hacer ejercicios y dejar de fumar. Pero contar con un amigo (o varios) puede ser especialmente beneficioso para adelgazar.
A la hora de perder peso, “la influencia social y las normas pueden empujar en direcciones diferentes”, le dijo a Yahoo Vida y Estilo Tricia Leahy, profesora de la Universidad de Connecticut que estudia las intervenciones conductuales para adelgazar. Si las personas más cercanas a ti están motivadas para hacer cambios similares a los que estás realizando, pueden aumentar tus posibilidades de éxito, explicó. Sin embargo, estar cerca de personas cuyos hábitos y elecciones te presionan inconscientemente para que comas alimentos poco saludables o te saltes la caminata puede socavar tus esfuerzos.
Nuestra cultura social está “muy enfocada en la comida”, le comentó a Yahoo Vida y Estilo Katie Rickel, psicóloga y directora ejecutiva de Structure House, un retiro para perder peso. “Cuando emprendes solo el camino hacia la pérdida de peso, realmente puedes sentirte excluido”. En cambio, si emprendes esa aventura con una pareja, un amigo u otras personas (ya sean amigos de Internet o un grupo de apoyo), podrás evitar esa sensación de aislamiento y tener un entorno motivante”, explicó.
Por otro lado, Rickel advirtió que adelgazar junto a un amigo cercano también conlleva ciertos riesgos relacionados con la comparación y la competitividad. Para evitar esos escollos hay que gestionar el proceso cuidadosamente, apuntó.
Comienzan dos viajes con el GLP-1, pero uno da un giro inesperado
AnnaLee y Dacia nunca han sido competitivas, pero AnnaLee suele ser un poco más proactiva. Tomó las riendas del proceso de pérdida de peso de ambas a partir de 2022, cuando comenzó a ver vídeos en TikTok y a investigar sobre los medicamentos. Aunque Dacia también estaba pensando en probar un GLP-1, “AnnaLee fue una gran motivación para comenzar”, reconoció. “Tengo que atribuirle gran parte de mi éxito en la pérdida de peso, porque había investigado tanto que podía responderme cualquier pregunta que le hiciera”.
En diciembre de ese año, después de superar los obstáculos de los seguros, AnnaLee comenzó con la marca Mounjaro. Unos seis meses después, Dacia recibió una receta para semaglutida compuesta. Sufrió unos efectos secundarios mucho más intensos que AnnaLee, como náuseas y cólicos estomacales que a veces la paralizaban. Pero también se dio cuenta de que estaba adelgazando mucho más rápido que su amiga.
“Me sentí en conflicto”, contó Dacia. “Estaba perdiendo peso muy rápido, pero AnnaLee se estaba estancando mucho. Me pregunté: ‘¿cómo puedo apoyarla y seguir sintiéndome feliz por mis avances?’”. Dacia no sabía si debía mencionarle a AnnaLee los diferentes ritmos en los que estaban perdiendo peso.
Hizo bien en andar con cuidado, según Rickel. Los comentarios sobre cuánto peso ha perdido cada persona, sobre todo entre amigos cercanos, “pueden crear un terreno fértil para la comparación y los celos”, explicó. AnnaLee, por su parte, había notado el contraste, pero intentaba no prestarle atención. “Estaba frustrada, creo que estaba en una fase de negación”, reconoció.
Pronto, ambas descubrirían que esa negación se extendía más allá de la pérdida de peso. AnnaLee dijo que comenzó a darse cuenta de que “era alcohólica durante la primera etapa de mi viaje”. Vomitaba a menudo cuando bebía alcohol y tomaba Mounjaro, lo que probablemente se debía a la combinación, así como a unas malas elecciones dietéticas. Beber alcohol mientras se consume un medicamento GLP-1 no está contraindicado, pero el alcohol puede agravar los efectos secundarios. De hecho, muchas personas descubren que simplemente no les apetece beber tanto, lo que ha llevado a algunos científicos a pensar que los GLP-1 podrían ser un tratamiento prometedor para la adicción.
Al principio, Mounjaro frenó el deseo de beber alcohol de AnnaLee, “pero también comencé a ir a terapia para lidiar con un trauma de la infancia”, comentó. “No quería experimentar esos sentimientos, así que simplemente bebía y luego me sentía fatal. Mi forma de beber superó los efectos de la medicina”. AnnaLe sospechó que el alcohol le impedía adelgazar más rápido.
La experiencia inicial de AnnaLee con Mounjaro le permitió darse cuenta de que necesitaba ayuda para lidiar con su problema con la bebida. Primero le contó a Dacia lo que estaba pasando exactamente. Luego, en marzo del año pasado, se sometió a un tratamiento ambulatorio. “Me sentí muy orgullosa de ella”, afirmó Dacia.
Lo mismo pero diferente: dónde se encuentran dos años después de empezar a usar el GLP-1
AnnaLee celebró un año de sobriedad el 12 de febrero de 2025. También ha cambiado a la tirzepatida. Durante el año que la ha estado tomando, AnnaLee ha perdido 31 kilos. En total, ha bajado 48 kilos desde que comenzó a usar las inyecciones para adelgazar en 2022. Ahora siente menos antojos de dulces y de comprar por impulso.
Tomar GLP-1 también ha alterado los antojos de Dacia. Ha perdido 32 kilos y en estos días le apetece poco el alcohol o los dulces. “Era como si mi cuerpo supiera que no necesita comer dulces ni beber alcohol”, comentó. Ambas mujeres se sienten mejor. Su inflamación ha disminuido y le duelen menos las articulaciones.
“Ahora podemos hacer muchas más cosas que antes”, reconoció AnnaLee. Dacia agregó que a ambas les ilusiona tener el mismo peso y usar la misma talla de ropa. Cuando se encuentran, ya no les preocupa que su peso les impida realizar ciertas actividades. De hecho, han probado nuevas aventuras, como el paddleboarding.
A lo largo de su proceso de adelgazamiento, ambas han tenido que lidiar con momentos difíciles en los que la envidia podía haber hecho acto de presencia. En cambio, se han apoyado mutuamente durante cada paso del camino e incluso se han acercado. Ambas dicen que se sienten más conectadas y cada una le agradece a la otra su éxito en la pérdida de peso.
“Sin AnnaLee, no habría vivido esta experiencia”, reconoció Dacia. “Creo que ni siquiera podía imaginarme diciéndoselo a mi médico”.
“Creo que habría comenzado a tomar un GLP-1, pero sin su apoyo me habría dado por vencida hace mucho tiempo”, dijo AnnaLee. “Dacia puede ser muy dura a veces, pero te dice cómo están las cosas, y a veces eso es lo que necesitas escuchar. Ella decía: ‘no, tienes que seguir luchando por ti’. Algunas semanas no querías, pero ella me empujaba”.
Dacia está de acuerdo en que puede ser exigente, mientras que AnnaLee es su opuesto ya que siempre es motivante. Según ella, eso las convirtió en el equipo perfecto para afrontar el reto de adelgazar: “Ella comenzó y yo estoy aquí para terminarlo”.
TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR | EN VIDEO
Cómo saber si el medicamento Ozempic es bueno para ti