El brutal linchamiento de Emmett Till, el adolescente negro que cambió la historia de EEUU
El linchamiento de un joven de 14 años en Mississippi en 1955 cambió la historia de Estados Unidos.
Emmett Till se convirtió en un ícono que aceleró la lucha por los derechos civiles no sólo porque fue brutalmente asesinado sino porque muchos pudieron constatarlo. Su nombre es recordado porque su madre insistió en que fuera velado a féretro abierto para mostrar a todos el sufrimiento al que fue sometido su hijo y los abusos que padeció su cuerpo mutilado.
La brutalidad de las torturas y la absolución de los acusados dejó una huella profunda en miles de personas que comenzaron a exigir el respeto de los derechos fundamentales de todas las razas.
Justo ocho años después del asesinato, unas 250.000 personas se congregaran en Washington en la célebre marcha por el trabajo y la libertad.
¿Quién era Emmett?
Emmett Till era un joven africano-estadounidense de 14 años nacido en Chicago, que viajó el verano de 1955 a visitar a su familia al pueblo de Money, estado de Mississippi, pero fue asesinado por piropear a una mujer blanca.
Los asaltantes de Emmett fueron el esposo y el hermano de la mujer lisonjeada.
Los dos hombres lo secuestraron de su casa, lo obligaron a arrastrar una rueca de algodón de unos 34 kilos hasta las orillas del río Tallahatchie, donde le ordenaron desnudarse. Allí lo golpearon salvajemente hasta sacarle un ojo, le dieron un tiro en el cráneo, amarraron su cuerpo a la rueca con un alambre de púas y lo lanzaron al río.
Racismo sureño
La esclavitud fue abolida con la Proclamación de Emancipación del año 1863, promulgada por el presidente Abraham Lincoln. Pero para mediados de la década de 1950, los estados del sur estadounidense aún practicaban políticas de exclusión racial que segregaban a los negros de las escuelas, el transporte público, los negocios privados y parques.
Emmett había nacido en una barrio de clase trabajadora del sur de Chicago, una enorme ciudad industrial que atrajo a millones de familias negras por sus oportunidades laborales y por su tolerancia racial.
La periodista e historiadora Isabel Wilkerson ilustró la situación del abominable sistema de supremacía blanca en su libro The Warmth of Other Suns. Los africano-estadounidenses "tenían que bajar de la acera cuando se acercaba una persona blanca, eran desaparecidos en trabajos que nadie deseaba sin importar su calificación o ambición, no podían votar pero podían ser ahorcados si eran sospechosos de la menor infracción".
No se trata solo de Geortge Floyd, se trata también de Breonna Taylor, de Eric Garner, de Trayvon Martin, de Emmett Till, de una muy larga lista.
Se trata de una evidente desigualdad que expone un sistema de racismo institucionalizado en 🇺🇸.https://t.co/qWXNCo2O5Y— Camilo A. Barrios (@camilobarriost) May 31, 2020
Wilkerson dijo que entre las décadas de 1880 y 1950, bandas de hombres blancos torturaron y mataron a unos 3.500 africano-estadounidenses, muchas veces frente a una muchedumbre, para vengar supuestas violaciones a los códigos sociales y legales de la época.
Emmett fue uno de los miles de asesinados. Aunque estudió en un escuela segregada en la agitada Chicago, no estaba preparado para el nivel de intolerancia y odio racial que se encontró en el sur, a pesar de las continuas advertencias de su madre antes del viaje.
La broma mortal
El 24 de agosto, Emmett y sus primos bromeaban frente a una tienda en Money cuando él alardeó sobre la novia blanca que lo esperaba a su regreso a casa.
Como los chicos no le creyeron la historia, lo desafiaron a pedirle una cita a la mujer que atendía el negocio. Emmett entró, compró caramelos y a su salida se le escuchó decir: "Hasta luego pequeña".
Pero Carolyn Bryant, una testigo que se encontraba dentro de la tienda, contó otra historia. Aseguró que Emmett la agarró, le hizo comentarios lascivos, y le silbó cuando ella le dijo que se fuera.
Roy Bryant, el dueño de la tienda y esposo de la mujer presuntamente agraviada, regresó de viaje varios días después y al enterarse del escandaloso cuento se enfureció y fue hasta la casa del tío de Emmett en medio de la noche a buscarlo.
Su tío Mose Wright le suplicó a Bryant que dejara al joven en paz, pero el enardecido marido se llevó a Emmett a empujones.
El cadáver fue encontrado unos días más tarde pero estaba tan desfigurado que Mose Wright sólo lo puedo reconocer porque aún llevaba un anillo con las iniciales de su familia.
Las autoridades locales lo querían enterrar de inmediato para evitar problemas pero la madre de Emmett, Mamie Bradley, exigió que el cuerpo fuera enviado a Chicago, donde fue velado con el féretro abierto para que todos pudieran ver lo que unos asesinos racistas habían hecho con su hijo.
La revista semanal Jet publicó la foto del cadáver de Emmett y luego el resto de los grandes medios cubrieron la historia.
The first Karen I ever heard of turned out to be called Carolyn. She lied that a black boy made eyes at her and he was killed in a fashion so horrifying that I still about the details of his death. His name of course was Emmett Till. https://t.co/7CQvk9WTMZ
— Musa Okwonga (@Okwonga) May 25, 2020
Los agresores fueron enjuiciados en un tribunal sólo para blancos en Sumner, Mississippi. Pero pocos testigos apoyaron la identificación positiva realizada por Mose Wright sobre los hombres que secuestraron y mataron a su sobrino.
Un jurado integrado exclusivamente por blancos, que deliberó durante menos de una hora, encontró a los acusados "inocentes" porque la fiscalía no pudo probar la identidad del cuerpo.
Bryant vendió su versión de lo ocurrido por 4.000 dólares a la Revista Look, jactándose de que el asesinato era una forma de justicia sureña para proteger a sus mujeres.
Resurge la verdad
El escritor Tim Tyson reveló que Carolyn Bryant se retractó de su testimonio y admitió que Emmett nunca tocó, amenazó, ni acosó a la mujer. "Nada de lo que hizo ese chico jamás podría justificar lo que le sucedió", dijo Carolyn a Tyson.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos reabrió el caso del brutal asesinato ante el "surgimiento de nueva información". Carolyn Bryant Donham sería la única persona que permanece viva para enfrentar cargos. Roy Bryant murió en 1994.
Lacking justice, we need the truth. Unfortunately, we have neither right now. Thank you to @Edpilkington for his recent article and to @deborahwattz for leading the charge for justice. https://t.co/2mCCh9iP1V
— Emmett Till's Memory Lives (@EmmeTillcenter) April 29, 2020
En 2020, el representante demócrata Bobby Rush introdujo el borrador de la Ley Emmet Till contra el Linchamiento para que ese tipo de homicidio se convierta en un crimen federal.
En la segunda mitad del siglo XX, el Congreso recibió unos 200 proyectos de ley contra el linchamiento y ninguno fue aprobado.