Tom Dumoulin le muestra el camino a Simone Biles
Antes incluso de que comenzara su participación en Tokio todo el planeta estaba pendiente de Simone Biles. Todos la señalaban como la principal candidata a convertirse en la reina de estos Juegos Olímpicos destacando la posibilidad que tenía de conseguir hasta seis medallas de oro. Una posibilidad que ya no existe después de que abandonara la final de gimnasia artística por equipos tras realizar únicamente el ejercicio de salto (aunque se hizo con la plata junto a sus compañeras) y renunciara posteriormente a la final del concurso completo individual.
¿El motivo? Ella misma lo explicó. “Simplemente no confiaba en mí misma tanto como solía hacerlo antes. Después del ejercicio de salto no quería continuar con el resto de aparatos, así que pensé que tenía que dar un paso al lado”, declaró ante los medios. “Desde que entro al tapiz, estoy yo sola, enfrentándome contra los demonios de mi cabeza... Debo hacer lo que es bueno para mí y concentrarme en mi salud mental y no comprometer mi bienestar”.
Biles dio una lección al mundo en el momento y el lugar ideal, donde las voces de los deportistas tienen más repercusión, en los Juegos Olímpicos. Demostró ante el mundo que las estrellas no son héroes, sino humanos que tienen que soportar una presión brutal y que en ocasiones, como le ha sucedido a ella, acaban bloqueados fruto del estrés, la ansiedad o el miedo.
La gimnasta estadounidense tiene muchos espejos en los que mirarse y que le pueden servir de ejemplo para superar el momento tan complicado que está sufriendo. Uno de ellos ha competido incluso en los Juegos Olímpicos dando toda una lección. Se trata del ciclista Tom Dumoulin, medalla de plata en la prueba de contrarreloj.
El neerlandés atravesó dos años muy complicados, 2019 y 2020. Antes había ganado el Giro de Italia de 2017, el Mundial CRI del mismo año, finalizó segundo tanto en la ronda italiana como en el Tour de Francia de 2018 y logró además otras victorias importantes como el Campeonato de contrarreloj de su país o el BinckBank Tour.
Su calvario comenzó tras una caída en el Giro de 2019 que le obligó a retirarse y le impidió participar en el Tour de aquel año. Lo intentó después en la Vuelta a España, pero ni siquiera llegó a terminar y, en un intento de dar un giro a su mal momento, dejó el equipo Sunweb y fichó por el potente Jumbo-Visma de cara a 2020.
Sin embargo, seguía sin recuperar su nivel. No pudo luchar por el podio del Tour de 2020 y en la Vuelta abandonó. Justo antes de iniciar la siguiente temporada, en 2021, su mente dijo basta y anunció una retirada temporal para replantearse su trayectoria profesional.
Ojalá vuelvas pronto y feliz.
Imagen: @Eurosport_ES pic.twitter.com/4dZ3fXzR9a— Luis Pasamontes (@pasamontesluis) April 18, 2021
No desconectó del todo de la bicicleta. Siguió entrenando e incluso se le pudo ver asistiendo como espectador en alguna carrera. Cinco meses después de su parón temporal, en mayo, su equipo anunciaba que el corredor de 30 años regresaba para participar en la Vuelta a Suiza, ya que “ha vuelto a encontrar la alegría en el ciclismo”.
Back in the peloton ➡️ @tom_dumoulin
His first race will be the Tour de Suisse🇨🇭— Team Jumbo-Visma cycling (@JumboVismaRoad) May 13, 2021
En Suiza ya se le vio a un buen nivel y poco después revalidó su título de campeón neerlandés contrarreloj. Pese a todo, pocos apostaban por él en la CRI de los Juegos Olímpicos de Tokio, donde se tenía que medir otros grandes especialistas como Primoz Roglic, Rohan Dennis, Stefan Küng, Flippo Ganna o Wout Van Aert. Además, en la prueba en línea tuvo una discreta actuación finalizando en el puesto 44.
Pero Tom Dumoulin dio una lección al mundo y se ha convertido en el mejor ejemplo para Simon Biles al realizar una contrarreloj espectacular y ganar la medalla de plata finalizando segundo solo por detrás de Roglic.
De necesitar una "desconexión del ciclismo" a ganar una medalla de plata 🥈 en #Tokyo2020
Paralizado de la emoción Dumoulin 😢 pic.twitter.com/ovhdFKSw8z— Eurosport.es (@Eurosport_ES) July 28, 2021
Dumoulin ha demostrado que cuando sientes “el peso del mundo sobre los hombros”, como definía la propia Biles su estado, la mejor decisión puede ser parar, reflexionar y volver a empezar. A él le ha funcionado mostrándole el camino a la gimnasta estadounidense.
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