Super Bowl LVIII: la inédita historia que protagonizarán Patrick Mahones y Jalen Hurts

El Super Bowl LVII está a la vuelta de la esquina y, como siempre, cada edición tiene una historia nueva que contar. La edición más reciente tiene un precedente sin igual, esta será la primera final en la historia de la NFL que contará con dos futbolistas de origen afroamericano al mando de los controles de sus respectivos equipos. Patrick Mahomes y Jalen Hurts además de ser protagonistas del encuentro, ambos futbolistas son la motivación para su comunidad.

Actualmente, el 67 por ciento de los jugadores que componen la NFL son de origen afroamericano y por primera vez en la historia, dos jugadores de color se enfrentarán por el trofeo de campeonato. Han pasado 37 años desde la primera vez que un mariscal de campo de origen negro se presentó como titular de un Super Bowl. Sin embargo, la insólita historia toma mayor fuerza cuando 21 de los 32 equipos son comandados por quarterbacks blancos.

A lo largo de las 57 ediciones del Super Bowl, ha existido menos de una decena de jugadores afroamericanos que han estado presentes en dicha posición en un partido de campeonato. Y Patrick Mahomes, con su título conseguido en 2020, apenas se convirtió en el tercero de esta categoría en conseguirlo. Su objetivo ahora es ser el primero en ganar más de uno. Y Jalen Hurts busca ser el cuarto en este rubro.

El jefe electrificante

No hay duda que hoy en día, Patrick Mahomes es una auténtica joya de la NFL. El futbolista de los Chiefs fue galardonado como el MVP de la presente campaña y cada vez nos tiene más acostumbrados a verlo en las instancias finales. Desde hace cinco temporadas, el mariscal mejor pagado en la historia del futbol americano, se integró al coach Andy Reid para hacer de la franquicia de Kansas una dinastía.

Andy Reid, quien es una profesional optimista y ganador, se ha convertido en el mentor perfecto de un jugador que no tiene limitantes en su talento. En los últimos cinco años, los Chiefs se han convertido en el equipo a vencer en la Conferencia Americana y también han sido los protagonistas de los últimos tres Super Bowls. La llegada de Mahomes cambió radicalmente el panorama del equipo, que pasó de ser contendiente a ganador. Gane o pierda, es un quarterback de élite que se ha acostumbrado a estas instancias, él y su compañero Travis Kelce han ganado más partidos incluso que algunas otras franquicias en playoffs. Mahomes y Kelce acumulan 10 victorias de postemporada, una más que los Carolina Panthers; dos más que los Jaguars de Jacksonville y tres más que Arizona Cardinals y los Detroit Lions.

Semana a semana, Mahomes ha demostrado que tiene brazo suficiente para destrozar a cualquiera defensiva que se le ponga enfrente. Tiene una visión distinta a la de cualquiera y utiliza sus capacidades en su totalidad para lanzar los ovoides adonde quiera y como quiera. En la presente campaña encabezó la lista de pasadores con 5,520 yardas aéreas y 41 pases de touchdown.

En el Draft del 2017, los Chief intercambiaron tres selecciones para ascender y poder hacerse de los servicios de Mahomes. En su campaña como novato jugó poco, pero un año después se hizo el responsable de su equipo con 22 años de edad y tras la salida del veterano Alex Smith. Desde entonces es el presente y futuro de la NFL. Hoy se encuentra en la búsqueda de su segundo anillo y no será la última vez que lo haga.

La revelación de la NFL

Mientras los Rams y los 49ers se enfrentaban por el pase al Super Bowl LVI, Jalen Hurts comenzó a prepararse físicamente para enfrentar la, aún, presente campaña. Hurts marcó un parteaguas y demostró al resto de sus compañeros la mentalidad de alguien que desea pelear de principio a fin para conseguir el objetivo más importante. Dos semanas antes, en la Ronda de Comodines, las Eagles habían caído a manos de Tampa Bay con una actuación de Jalen para el olvido con dos intercepciones.

Las desilusiones en estas instancias ya habían formado parte de la carrera colegial de Hurts. Ahora está por disputar su primera final en el máximo nivel, sin embargo, la última ocasión que estuvo en un encuentro de tales condiciones fue cuando era el mariscal de la Universidad de Alabama. En 2018, Hurts disputaba su tercera final de campeonato nacional como titular y fue enviado a la banca por el coach Nick Saban, a pesar de ser una de las estrellas de ese momento. Fue relegado por un tal Tua Tagovailoa que llevó a Alabama a ganar el título. Hurts lloró toda la noche por la decisión de su entrenador y nunca se quejó públicamente por ello.

Para el 2019, Jalen se transfirió a la Universidad de Oklahoma donde lanzó para 3,851 yardas y 32 pases de anotación, convirtiéndose así en uno de los nominados para ganar el Trofeo Heisman. Al año siguiente fue seleccionado en la segunda ronda del Draft por el equipo de Filadelfia. En su primera temporada, Hurts jugó apenas cuatro encuentros en una campaña desastrosa para el equipo, que acabó con una marca de 4-11.

Su habilidad para correr y lanzar lo han consolidado como la pieza angular del equipo ofensivo de Filadelfia. Su personalidad dentro del equipo lo han puesto como uno de los mejores de toda la liga. Maneja a sus compañeros con liderazgo y su presencia dentro del campo ha colocado al equipo en la disputa del título cuestión que, sin el mariscal, difícilmente hubieran podido conseguir.

A pesar de que sus primeros encuentros en la NFL no fueron destacables, Hurts dio un cambio radical a su estilo de juego es uno de los mejores de la nueva generación de mariscales. Esta temporada cerró con 3, 701 yardas aéreas; 21 pases de anotación y 13 touchdowns por tierra. Jalen peleó por ser considerado el MVP, pero Mahomes logró arrebatárselo.

Los dos futbolistas tienen todo en charola de plata para poder llevar a sus respectivos equipos a conseguir el trofeo, pero enfrente tendrán que batallar con portentosas defensivas. Por si fuera poco, ambos protagonizarán el enfrentamiento entre los quarterbacks titulares más jóvenes en la historia del Super Bowl. Dicho dato es un aliciente, así nos queda más tiempo para ver más de ambos.